jueves, 14 de febrero de 2013

Timothy Olyphant


Los años sientan bien a Timothy Olyphant. 
Ya era guapo y parecía imposible que pudiera serlo más, pero ahí está "Justified", la serie que funciona como recompensa a la carrera de este hawaiiano, empezada en algún lugar de la década de los noventa.
Aunque ha hecho muchas películas, algunas como protagonista, nosotros queremos a Timothy en función de Catodia, donde se le ha podido ver en tantas buenas apariciones, todas con el sello de lo inolvidable. 


Su papel más recordado y celebrado antes de "Justified" también requería llevar sombrero, placa de agente de la ley y acabar con los malos. 
En la gloriosa, tristemente incompleta "Deadwood", Olyphant era pura tensión como el honorable Seth Bullock, con la estrella de plata puesta en el ojal y la tragedia agazapada en cualquier esquina.


Antes de volver a calzarse las botas vaqueras, hubo intentos de trascender a Olyphant en el cine, pero Olyphant es un guapo nuestro, doméstico, de pequeña pantalla, menos sabroso si lo expandimos y lo ponemos en grandes carteleras y marquesinas.


Tras su paso por "Damages", la cadena FX le hacía reverencia y lo colocaba como protagonista y estrella de "Justified". 
Aunque agente de la ley, Rayland Givens es muchísimo más humoroso que Seth Bullock y no tiene complejos en saltarse las reglas día sí, día también. 
El peligro es constante, pero la tragedia se vive con un tono de comedia negra.


"Justified", quizá la mejor serie actualmente en emisión, recorre ahora su cuarta temporada, tan jugosa y trepidante como acostumbra. 
Es uno de esos raros productos contemporáneos, donde todo está en su sitio y hasta la brillantez de diálogos, situaciones y personajes encuentra su justa medida. 


Además de sus vistosos giros argumentales y los memorables seres que pululan por sus historias, "Justified" defiende la posibilidad de hacer un western ambientado en la actualidad, surrealizando la sórdida vida de la muy profunda América montuna. 


Y Timothy, que ya era guapo, se ha puesto ese sombrero Stetson, nos luce unas canas terriblemente favorecedoras y suelta sus líneas y anda estilo Gary Cooper para mayor efecto. El infarto maromial está asegurado en más de una ocasión. 
Con esos ojos, ese caminar y esa sonrisa de medio lado, mudarse a Kentucky parece la mejor idea del mundo.


Volver a "Justified" ya era motivo de celebración al reencontrarnos con Olyphant, cuando además regala una aparición especial en mi amada "Archer", divertídisima serie de animación, en la que ha prestado su inconfundible voz rota para un personaje episódico.
Casi fenezco del placer.


Timothy Olyphant es para empezar a suspirar y no poder parar. A Kentucky, se ha dicho.

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